El tacto pedagógico se manifiesta principalmente como una orientación consciente en cuanto a la forma de ser y actuar con los niños.
Una forma de contenerse es la paciencia, la facultad de esperar una ecuanimidad. La paciencia ha sido descrita como una virtud fundamental que todo profesor y todo padre debe poseer.
Muchos de los profesores no sabemos en realidad que somos y cual es nuestro papel, para esto debemos tomar en cuenta el significado de “educare”, -conducir hacia- el mundo de la conciencia, la responsabilidad, la madurez y la comprensión de los alumnos.
El tacto pedagógico es la forma de actuar en la educación. Llevar a cabo el proceso de enseñanza aprendizaje, pero hay que definir aprendizaje: es un proceso de explicación y clarificación desarrollado progresivamente a partir de experiencias que inicialmente son más o menos pre-reflexivas. El aprendizaje es una forma de apropiación de la herencia cultural disponible, no sólo es un proceso individual de asimilación. La interacción social es el origen y el motor del aprendizaje, Vygotsky (1997).
Algo que me gustó de la lectura es que en cada subtema que se va viendo te ejemplifica las experiencias de los profesores ante situaciones que implican poner lo máximo de cada uno. Digo que me gustó porque fue una manera de entender mejor e interpretar la información que te proporcionaba. Como por ejemplo cuando el profesor con el simple hecho de prestarle un poquito más de atención a un alumno que no hablaba en clase, este se le nota el cambio y comienza a participar. Otro punto importante es que hay un tono para cada situación, ya que no podemos estar gritando si vamos por ejemplo, hablar con los padres, siempre hay que saber como actuar y controlar con seguridad las situaciones impredecibles. Algunas veces los profesores no nos damos cuenta de cómo influimos en nuestros alumnos, incluso en aquellos que menos imaginamos. Por que la influencia llega a ser tan sutil que no llegamos a notarlo.
El clima o ambiente de trabajo favorable dentro del aula es importantísimo para llevar una clase amena y tener buenos resultados por parte de los alumnos, ya que para todos los seres humanos todo tiene un cierto ambiente.
Los niños tienden a admirar y apreciar al profesor que tiene estilo o personalidad siempre que esta apariencia sea auténtica. Los maestros deben ser capaces de que algo que no se entienda o que se malinterprete resulte más sencillo para los alumnos.
Lo que aprendí es que un profesor siempre debe estar entregado a su profesión y alimentar el interés de los alumnos, por que estar interesado es estar intensamente entregado a algo o alguien. Al igual que el humor es importante ante situaciones que te puedan hacer sentir incómodo, uno siempre tiene que tomarlo con calma y no reaccionar con coraje. Comprendí que la disciplina en los estudiantes o en uno mismo crea condiciones favorables para el verdadero aprendizaje, en pocas palabras sino hay disciplina no hay aprendizaje. También no hay que meterse en todos los problemas de los alumnos, siempre hay que saber cuando contenerse y cuando intervenir para ayudar, en muchas de las situaciones la mejor forma de actuara es no actuar.
Creo que el tacto incluye un sinnúmero de situaciones en las que uno puede ayudar a los alumnos a salir adelante y que tengan un buen aprendizaje, abarca el como saber enseñar y guiar a nuestros alumnos a una vida futura en la que se les presentarán problemas que tendrán que resolver con las herramientas que el profesor le proporcione durante su contacto con el alumno.
Dentro de un mes y medio aproximadamente se acerca una jornada de prácticas en las que estaré presente durante una semana, trataré de llevar a cabo ejemplos de esta lectura para ver si me funcionan, como por ejemplo la disciplina que es muy importante, la relación con los padre que es un vínculo importante en el aprendizaje de los niños. Observaré las características de los alumnos y tratar de definir que problemas tienen y la manera de actuar para integrarlos al grupo de trabajo en el aula, si esta semana no es suficiente para definir, al termino de esta jornada viene otra un mes después para mejorar lo que traté de aplicar en la jornada pasada. Trataré de ser una persona con buenos valores, habilidades, actitudes y conocimientos para ser un modelo a seguir de los alumnos en donde me vean con respeto y como un guía en el proceso de enseñanza – aprendizaje en el desarrollo ante la sociedad.
BIBLIOGRAFÍA
-Manen, Max van (1998), “El tacto pedagógico” y “El tacto y la enseñanza”, en El tacto en la enseñanza. El significado de la sensibilidad pedagógica, Barcelona, Paidós (Paidós Educador, 135), pp. 159-214. .
Baquero, Ricardo. “Vygotsky y el aprendizaje escolar”. Buenos Aires. Editorial Aique S.A. 1997.
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